El FMI ha publicado su informe de análisis fiscal en el que arroja nuevos detalles que, si bien apuntan a serias diferencias entre España y la media comunitaria, dejan bien parado al país en comparación con otros grandes estados vecinos. En concreto, las previsiones emitidas por el fondo indican que España está a punto de mejorar la senda fiscal de Francia e Italia por primera vez en una década. Los datos del FMI, que abarcan desde 2010 hasta el año 2024, indican que el sorpasso al déficit galo se producirá este año y el del italiano en 2020.
Hay que tener en cuenta, no obstante, que el efecto lo provoca más el empeoramiento de las cifras de Francia e Italia que la leve mejora prevista para el dato español. En concreto, el FMI apunta a que si bien el déficit galo y español culminaron 2018 en un -2,5%, España logrará reconducirlo este ejercicio hasta el -2,2% mientras que Francia lo incrementará al -3,3%. A partir de ahí, la expectativa es que el agujero fiscal galo se reconduzca a una horquilla entre el -2,4% y el -2,6% durante el próximo lustro, mientras que el español se estancará en una cota cercana al -1,9%.
En el caso de Italia, que el año pasado cerró en el -2,1% y este año acabará en el -2%, retrocederá en 2020 al 2,5%, seis décimas por encima de España, manteniéndose cercano al -2,6% hasta 2024. Pese a la diferencia con estos dos países o la mejora desde el -10,5% que de déficit que registró en 2010, el FMI detecta que España mantendrá un diferencial de cerca de un punto con la media de la zona euro durante los próximos años, y muy lejos del superávit alemán, que cerró 2018 en el 1,9% y se mantendrá entorno al 1% durante otro lustro.
El déficit que presenta España deriva de la diferencia entre los ingresos que obtiene, que este año cerrarán en un 39,1% del PIB, según el FMI, y los gastos que realiza, que se situarán a final del ejercicio en el 41,3%. A la espera de ver si la nueva legislatura depara algún tipo de reforma fiscal que eleve la recaudación o un plan de ajuste de gastos, el FMI asume que España mantendrá un diferencial de siete puntos menos de ingresos con la zona euro entre 2020 y 2024 así como otro de unos seis puntos en el volumen de gasto, lo que explica su expectativa de que el país no vaya a acercarse al superávit fiscal a medio plazo.
En su informe de coyuntura económica global del martes, el FMI advirtió específicamente a España, entre otros países comunitarios, que debería realizar un esfuerzo por sanear sus cuentas y mejorar sus colchones fiscales a fin de prepararse para otra posible crisis en el futuro. Especialmente, remarca, dado su elevado nivel de deuda. En este sentido, el FMI estima que España pasará de un endeudamiento del 97,1% del PIB en 2018, a un 96,4% este año, un 95,2% el próximo ejercicio y un descenso progresivo hasta el 90,5% en 2024.