La Generalitat vuelve a las reuniones del Ejecutivo con todas las autonomías

La Generalitat vuelve a las reuniones del Ejecutivo con todas las autonomías

La Generalitat de Cataluña ha avanzado al Gobierno central que está dispuesta a intervenir y participar, la semana que viene, en una reunión de la comisión de financiación autonómica multilateral, montada a partir de las reclamaciones planteadas en el Consejo de Política Fiscal y Financiera sobre las insuficiencias del sistema detectadas en todas las comunidades.

La Generalitat enviará a esa cita al subdirector general de Presupuestos, y «explorará» así si tiene sentido continuar con esas reuniones no bilaterales, que son su gran apuesta política con el Ejecutivo de Pedro Sánchez. Las dos vías son complementarias, al menos por ahora. El martes, de hecho, está convocada la comisión mixta de Asuntos Económicos y Fiscales, donde el Gobierno catalán llevará entre otras cuestiones la deuda pendiente, que según sus datos asciende a 7.607 millones.

La primera pista de confirmación de que el nuevo clima de diálogo con Cataluña podría empezar a dar algunos frutos la aportó la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en la sesión de control en el Congreso de este martes, cuando respondió a una diputada del PP sobre si la situación política actual está afectando a la estabilidad financiera de España. Montero argumentó que no y señaló que resolver dudas a los ciudadanos no es despilfarrar ni malgastar. La ministra agregó que “la situación de Cataluña es muy importante para todo el contexto nacional” y ratificó que en ese contexto el Ejecutivo de Pedro Sánchez “no se va a cansar de trabajar y dialogar”. Fue entonces cuando confirmó que a finales de septiembre se producirá una reunión de la Comisión de Financiación Autonómica a la que acudirá la Generalitat. No dio más datos, porque muchos aspectos de esa sesión aún están por concretar.

Fuentes del Gobierno central y de la Generalitat ratificaron más tarde que efectivamente esa cita se está cerrando en estos momentos, y probablemente será la semana que viene con todas las autonomías. Y desde el Gobierno catalán concretaron que a la misma acudirá un técnico, no un político, para rebajar un poco las expectativas. El alto cargo del Gobierno catalán que se presentará en esa primera reunión exploratoria será el subdirector general de Presupuestos (ni el director general ni el consejero) porque se quiere comprobar antes de avanzar más cuáles son las intenciones reales del Gobierno central, según fuentes del Ejecutivo autonómico.

Desde la Generalitat reconocen, además, que el Gobierno central les ha pedido algún gesto político como acudir a esa minicumbre autonómica como compensación a las señales de distensión ofrecidas hasta ahora desde La Moncloa y como contrapeso a las citas bilaterales que se están multiplicando con distintos ministerios. «Nuestro marco de juego y por lo que nosotros apostamos en esta relación siguen siendo las reuniones bilaterales, pero estamos dispuestos a explorar más cosas y a las demás reuniones iremos a escuchar», sostienen altos cargos del Gobierno catalán implicados en estas negociaciones.

En este sentido, esa primera participación en la comisión técnica de Financiación Autonómica se considera, desde ambas partes, un primer paso para que la Generalitat de Cataluña vuelva en breve también a las reuniones en Madrid del Consejo de Política Fiscal y Financiera con las demás autonomías. Es ahí donde se diseña y dibuja el sistema de financiación de todas las comunidades autónomas. Ningún representante de la Generalitat se presentó a las dos últimas convocatorias de esos consejos, en julio y agosto pasado.

«La pelota la tiene el Gobierno central ahora y si ellos chutan y nos la pasan nosotros tendremos que hacer algo y devolverla», explican gráficamente fuentes del Gobierno catalán. Las mismas fuentes muestran su disposición a acudir a un futuro Consejo de Política Fiscal y Financiera para, entre otras cosas, poner en aprietos a la ministra Montero recordándole sus intervenciones cuando era consejera de Economía de la Junta de Andalucía y pedía consejos más participativos y deliberativos.