España ha encadenado en 2017 cuatro años creando empleo a un ritmo alto: solo el año pasado la Seguridad Social ganó 611.146 afiliados. La alta preprecariedad es el gran pero: buena parte de ese aumento se debe a temporales y trabajo a tiempo parcial (380.000). Y esa precariedad es una de las explicaciones -con permiso del paro- de la debilidad de los salarios en los últimos años, opinan varios expertos consultados. También el BCE maneja esta hipótesis para la zona euro, donde los sueldos crecían un 2%; en España, el 0,5%.
El Banco Central Europeo está sorprendido por la debilidad que muestran los salarios en la recuperación. Buscándole explicaciones a este comportamiento en la zona euro cuando el paro ha bajado más de lo que se esperaba, ha llegado a la conclusión de que el subempleo -y los desocupados que no aparecen en las estadísticas como parados- puede ser una de las causas que está detrás. ¿Qué es el subempleo? Trabajar a tiempo parcial por no poder hacerlo a tiempo completo. Y España es uno de los países que descolla en este aspecto: casi el 60% de quienes trabajan a tiempo parcial quiere hacerlo más horas.
Otro de esos indicadores de precariedad en los que España destaca entre los países de su entorno es el empleo temporal. Desde que comenzó a crecer el mercado laboral, la tasa de temporalidad ha subido unos cinco puntos, hasta el 27,4% el pasado verano. Y la inmensa mayoría de ese empleo temporal es involuntario.